LA FIESTA ESTÁ VIVA
Por: Rafael Cué*
México no puede darle la espalda a México. Nuestra riqueza cultural e histórica no puede verse vapuleada por políticos oportunistas de incultura insultante. Gente que se olvida de los ciudadanos y creen que las mascotas son el hilo conductor para conectar con las personas. Verdaderamente patéticos, caros e inoperantes.
Es responsabilidad de todos los mexicanos mantener, difundir y promover las enormes virtudes que tenemos como nación. Nuestra cultura, nuestra historia, nuestra geografía, nuestro arte e idiosincrasia. También como no, el respeto a quienes no comulgan con nuestras ideas. La inclusión basada en el respeto debería de ser la base para la sociedad actual.
La cultura de la tauromaquia se mantiene firme como una actividad lícita, amparada en nuestra Carta Magna. Si bien debemos atender los viles ataques de una minoría impulsada por intereses ocultos, hoy la tauromaquia pese a las amenazas prohibicionistas está más viva que nunca, porque se ha convertido en México y en el mundo como una reivindicación de la libertad. Así de sencillo. Ya no es una cuestión de toros sí o toros no. Si es arte o no lo es, que sí lo es, por cierto, o si debemos vivir en una sociedad que sólo pretende idealizar lo justo, lo bello o lo correcto bajo una sola óptica, aunque tenga que prohibir, así de absurdos estos tiempos.
El estado de Aguascalientes es sin duda el más taurino de este país. Cuenta con 10 ganaderías de toros de lidia. Ha sido y es cuna de grandes toreros. Hoy en día, además, cuenta con la Academia Taurina de Aguascalientes que se encarga de formar no sólo toreros, sino hombres de bien, abrazando a toreros en ciernes de cualquier parte del estado, del país o del mundo.
Además de la gran feria de San Marcos en el mes de abril y principios de mayo, Aguascalientes, cuenta con dos plazas de toros, una monumental y otra pequeña, coqueta, con mucho sabor y encanto en la que se vive cada año por primavera la esencia pura del toreo. La ilusión de los novilleros por alcanzar el sueño de hacerse figuras, la formación de niños y jóvenes aficionados en el sentido no de acumulación de conocimientos o de desarrollar un juicio taurino, sino de vivir y gozar la maravillosa experiencia de las emociones que se viven en cada festejo taurino. De conectar y admirar a novilleros que son de su generación, rejuveneciendo la Fiesta, respetando a los mayores y valorando que gente de su edad es capaz de convertirse en los héroes de esta compleja modernidad.
El pasado domingo se dio la cuarta novillada de este interesante e importante serial. Se lidiaron novillos de la ganadería de Monte Caldera, de reciente triunfo, en la San Marcos para tres toreros cuyo presente es una realidad, con inmenso potencial y esperanzador futuro. Daniel Prieto del merito Aguascalientes, Bruno Aloi capitalino y el queretano Andrés García. Tres nombres que ilusionan y que dieron una tarde inolvidable a los casi cinco mil asistentes a la plaza de toros San Marcos.
No están sus carreras para definir sus tauromaquias, ni vaticinar su futuro. Están para gozar con sus actuaciones, frescura, valor y arte. Para verlos competir por las palmas del público, por ser uno mejor que el otro. Eso es el toreo, cuna de valores para la vida. Qué orgullo poder contar con tres toreros, que ya lo son, el tiempo, el toro y Dios dirán si se les cumple su sueño de convertirse en figuras del toreo, mientras tanto se forman como hombres de bien, con un objetivo en la vida que intentan alcanzar con base en el sacrificio, la vocación, el esfuerzo y la humildad de quien toma la vida como un reto.
Tres toreros a hombros, gran entrada en la San Marcos, respeto y alegría, cultura y familia, triunfo ganadero y la reivindicación de que en este país la libertad debe de ser valorada con valentía con base en la inclusión de todas las formas de pensar, del correcto entendimiento de la relación del ser humano con los animales. ¡Enhorabuena Aguascalientes!
Twitter: @rafaelcue
*Artículo escrito para el diario El Financiero, reproducido por voluntad del autor en Intelisport.
