Por: Rubén Romero

Articulista invitado

El keniano Rhonex Kipruto, de 23 años, dueño del récord mundial de 10K (26’24», Valencia 2020) y medalla de bronce en 10 mil metros en los Campeonatos Mundiales de Atletismo de Doha 2019, fue suspendido por sospechas de dopaje por la Unidad de Integridad del Atletismo (UIA) que funciona al margen de la World Athletics (WA).

Apunte: se trata de una inhabilitación que surge de inconsistencias encontradas en el pasaporte biológico del atleta entre julio de 2018 y marzo de 2022. No se trata de una sanción; se le suspende mientras se deslindan responsabilidades.

Un pasaporte biológico es un registro electrónico de los niveles de hematocrito, hemoglobina VO2 Max etc. de cada atleta durante un período de tiempo, que se hace para detectar discrepancias con las lecturas normales de esos parámetros.

No se trata de una sanción directa por haber recibido el resultado adverso de una prueba de dopaje. Sin embargo, Kipruto no podrá participar en competencias de la WA hasta que se aclare su situación.

El atleta, por su parte, ha negado todo tipo de responsabilidad, ha ofrecido someterse a todos los estudios que sean necesarios y a mantenerse bajo supervisión 24 horas al día, 7 días a la semana.

Lo cierto es que, si la UIA lo encuentra culpable, Kipruto podría enfrentar hasta cuatro años de veto y pasaría a ser parte de la lista de 65 kenianos vetados por sus resultados adversos en pruebas de dopaje.

La reacción de Kipruto ha sido enfática defendiendo su inocencia, y el señalamiento de la UIA difícilmente podría ser más pesado.

No hace falta decir que esta situación es extremadamente grave para Kenia y para todo el atletismo. Se trata de un récord del orbe y de una medalla mundialista.

El problema es que dentro de todo esto hay algo que no está bien. Esta medida deja la sensación de que para la UIA a Kipruto (o cualquier otro atleta) se presume culpable hasta que se demuestre su inocencia.

Es cierto que la presunción de culpabilidad del ateta debe ser muy alta para UIA, como también es esperable que al final se confirme ese señalamiento.

Pero ¿Y si resulta que Kipruto está «limpio»? ¿Bastará con un «usted disculpe»?

Recuerda que correr es salud y algo más… mejor calidad de vida.

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